Paula Pareto cerró con diploma una brillante trayectoria

La judoca argentina Paulo Pareto, medalla de oro en Río de Janeiro 2016, cerró esta madrugada su carrera olímpica sin podio pero con diploma y un reconocimiento unánime de la comunidad deportiva, luego de disputar cuatro combates en Tokio 2020 y caer en el último, un repechaje por la pelea del bronce.

La «Peque» perdió por waza-ari con la portuguesa Catarina Costa, a quien abrazó y felicitó sobre el tatami del Centro Nippon Budokan, en un gesto de generosidad que postergó sus sentimientos por realizar su última intervención en los Juegos.

Al retirarse del espacio de lucha, la argentina se fundió en un sentido abrazo con su entrenadora Laura Matinel, soltó lágrimas de emoción y luego recibió el cálido saludo de las autoridades de la delegación argentina, entre ellas, el presidente del Comité Olímpico (COA), Gerardo Werthein.

Pareto, de 35 años, afrontó su última lucha en Tokio con una limitación física por el esguince de codo izquierdo que sufrió en la anterior derrota por ippon ante la japonesa Funa Tonaki, tercera del ranking mundial, en los cuartos de final de su división.

Los otros dos Juegos asumidos por la mejor judoca argentina de la historia acabaron con una medalla en su cuello: bronce en Beijing 2008 y oro en Río 2016, lo que la convirtió en la primera mujer argentina en coronarse campeona olímpica.

La mañana en Tokio, noche en Argentina, había comenzado con buenas perspectivas para la atleta de San Fernando, vencedora por ippon en sus dos primeras presentaciones.